Las fotos que hacemos normalmente de día tienen un tiempo de exposición de alrededor de un milisegundo (1/1000 segundos), en función de la cámara, y el mayor tiempo de exposición programado que admite una cámara digital profesional normal es de 60 segundos. Pues a más de un fotógrafo se le ha ocurrido la genial idea de sobrepasar esos estrechos límites y plasmar en una sola foto mucho más tiempo. La primera solarigrafía de este post la hizo Justin Quinnell y recoge 6 meses de exposición del puente de Bristol. La segunda, obra de Michael Chrisman, muestra la ciudad de Toronto durante todo un año. La tercera, hecha por Michael Wesely, contiene la información lumínica captada por un papel fotosensible durante nada menos que 3 años.
Es curioso como se puede comprimir el tiempo en una sola imagen. En ella, serán más o menos visibles unos elementos u otros en función del tiempo que hayan permanecido estáticos frente a la cámara. Además, se puede analizar las estelas del sol, descubriendo que unos días fueron menos soleados que otros. Todas estas fotos están hechas con película de yoduro de plata, ya que una cámara digital no soporta tiempos de exposición tan largos.
Actualización: Myriam, ya habitual colaboradora del blog, me comenta que casualmente ayer publicaron también un post sobre el mismo tema en La ciencia es bella, donde se puede ver el sofisticado invento utilizado para tomar las solarigrafías.
Fuentes: mi amigo Dani, que me pasó en enlace a este artículo y yo encontré este otro sobre el tema.
2 comentarios:
La foto del día.
http://apod.nasa.gov/apod/ap120121.html
já, genial!
Gracias por el aporte, tan apropiado :)
Publicar un comentario